Gabriel Picatto ha sido tan elogiado como vituperado en su carrera profesional. Justos elogios, indiscutibles muestras de admiración recibió al parte decisiva de grandes gestas de sus equipos, y cuando los resultados no acompañaron su tarea hubo que aguantar las reprobaciones de hinchas, mala onda de sus jugadores, cuestionamientos dirigenciales y posturas irreductibles de la prensa. Hoy, Picatto nuevamente está en la picota. ¿Volvería Fernando Duró (foto) a Boca?.
Las cuatro derrotas consecutivas promueven que el ciclo de Gabriel se halle en su peor momento ya que el séptimo puesto no condice con el actual reinado que ostenta.
La historia dirá que algo similar ha ocurrido en la pasada temporada cuando el coach santafesino (y entrerriano por adopción de afecto) suplió a Eduardo Cadillac y luego se coronó campeón pese a padecer algunas tormentas.
Boca actualmente está sumergido en un mar de dudas y el revés del pasado fin de semana ante Belgrano en el “Luis Conde” profundizó los malestares.
Duele, por el aprecio -y sobre todo respeto- que uno le tiene saber por comentarios vía Messenger con miembros de estamentos conocedores del tema, que ya se esté hablando de un corte de técnico. Y decimos “duele” porque sabemos que el Gaby es un luchador nato, que aparte de cualidades conceptuales en básquet, le agrega un tesón y honestidad indiscutibles.
Pero así como hemos afirmado en otras columnas que tras el recambio de extranjeros o uno nacional, el fusible siguiente es el coach, nos damos cuenta que Picatto tiene las horas contadas en el banco “Xeneize” si no lo ayudan sus propios jugadores en los dos próximos partidos.
De hecho que ya hay dos nombres (o apellidos) ilustres dando vueltas. Suenan muy fuerte -al menos vía Chat- Fernando Duró y Rubén Magnano, aunque tercia “en discordia” Néstor García.
Hasta se dice que si llega Duró, va para Comodoro Picatto o Facundo Muller.
Es que Boca, que siempre tiene la obligación de ser protagonista y las cosas no se le vienen dando en torno torneo que actuó, más allá que en el seno “Auriazul” se sabe que hubo lesionados, que los extranjeros no rindieron a pleno, y por ejemplo que acaba de sumarse Gaby Fernández.
Al menos en las dos semanas próximas, ya está claro que habrá nuevos recambios de extranjeros y que se habla de sumar otro base.
Estos serían los próximos pasos por estas horas, pero igualmente el DT sigue siendo evaluado y si por ahí pesan las charlas entre dirigentes y agentes (incluyendo a jugadores como ya pasó), ojo que no es descartable un pulgar para abajo hacia la gestión de este joven y buen entrenador que es Gabriel Picatto.
Las cuatro derrotas consecutivas promueven que el ciclo de Gabriel se halle en su peor momento ya que el séptimo puesto no condice con el actual reinado que ostenta.
La historia dirá que algo similar ha ocurrido en la pasada temporada cuando el coach santafesino (y entrerriano por adopción de afecto) suplió a Eduardo Cadillac y luego se coronó campeón pese a padecer algunas tormentas.
Boca actualmente está sumergido en un mar de dudas y el revés del pasado fin de semana ante Belgrano en el “Luis Conde” profundizó los malestares.
Duele, por el aprecio -y sobre todo respeto- que uno le tiene saber por comentarios vía Messenger con miembros de estamentos conocedores del tema, que ya se esté hablando de un corte de técnico. Y decimos “duele” porque sabemos que el Gaby es un luchador nato, que aparte de cualidades conceptuales en básquet, le agrega un tesón y honestidad indiscutibles.
Pero así como hemos afirmado en otras columnas que tras el recambio de extranjeros o uno nacional, el fusible siguiente es el coach, nos damos cuenta que Picatto tiene las horas contadas en el banco “Xeneize” si no lo ayudan sus propios jugadores en los dos próximos partidos.
De hecho que ya hay dos nombres (o apellidos) ilustres dando vueltas. Suenan muy fuerte -al menos vía Chat- Fernando Duró y Rubén Magnano, aunque tercia “en discordia” Néstor García.
Hasta se dice que si llega Duró, va para Comodoro Picatto o Facundo Muller.
Es que Boca, que siempre tiene la obligación de ser protagonista y las cosas no se le vienen dando en torno torneo que actuó, más allá que en el seno “Auriazul” se sabe que hubo lesionados, que los extranjeros no rindieron a pleno, y por ejemplo que acaba de sumarse Gaby Fernández.
Al menos en las dos semanas próximas, ya está claro que habrá nuevos recambios de extranjeros y que se habla de sumar otro base.
Estos serían los próximos pasos por estas horas, pero igualmente el DT sigue siendo evaluado y si por ahí pesan las charlas entre dirigentes y agentes (incluyendo a jugadores como ya pasó), ojo que no es descartable un pulgar para abajo hacia la gestión de este joven y buen entrenador que es Gabriel Picatto.
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